Ahorro
La guía definitva para ahorrar sin morir en el intento
Publicado por Kosmos
11 de noviembre de 2025
Aprende a administrarte y a entender tus finanzas personales. Te explicamos detalladamente pasos a seguir para poder evitar imprevistos en el futuro y sentir una tranquilidad financiera.
En este artículo
Cada mes llega una nómina que se va igual de rápido que entra; entre gastos del hogar, la compra, las facturas amontonadas por pagar y esos dulces deliciosos a los que tu cartera no se puede resistir… Todo tiene un precio, y las recompensas a corto plazo que generan estos gastos momentáneos no ayudan a mantener nuestra cartera llena. Aunque el tema de las finanzas pueda parecer un quebradero de cabeza para muchos, adquirir unos buenos hábitos de ahorro es mucho más fácil de lo que parece. Así que te traemos una guía con varios consejos para cuidar tu salud financiera para que tu futuro económico sea lo más estable y seguro posible.
5 trucos para aprender a ahorrar
Cuanto más ganamos, más tendemos a derrochar el dinero porque más relajados y menos atentos nos permitimos estar a lo que pagamos al sentir una falsa tranquilidad financiera. Sin embargo, cuando la situación económica no es tan favorable, controlamos hasta el último céntimo, compramos la marca más barata y llegamos a renunciar a planes para evitar gastar. Ahorrar es fundamental para poder vivir una vida tranquila en la que el dinero no sea una limitación para tomar decisiones. Una situación en la que puedas tener un colchón económico para posibles imprevistos o emergencias sin depender constantemente de tus ingresos.
1. Pierde el miedo a las finanzas: entender es el primer paso
La información es poder, cuanto más conocimiento, más fácil nos será gestionar nuestra economía personal. La educación financiera es esencial para tomar mejores decisiones y contar con una mayor concienciación de las oportunidades y riesgos que afectan nuestra economía personal. En 2025, sólo el 18% de los ciudadanos de la UE mostró un nivel alto de conocimientos financieros, según el Eurobarómetro que mide el nivel de educación financiera en la UE. Un dato que revela cifras preocupantes, aunque no sorprendentes.
Aprendiendo sobre conceptos financieros, conseguiremos entender cómo leer una nómina, o cómo utilizar los productos y servicios que ofrecen los bancos, sin caer en estafas o engaños. Ahora más que nunca contamos con una gran variedad de canales de divulgación de economía que ponen la información al alcance de todos.
2. Abre tu cuenta de ahorro
Las cuentas de ahorro son una alternativa sencilla y muy interesante para ahorrar de forma más eficaz tu dinero a corto y largo plazo. Su funcionalidad principal se basa en cuidar el dinero del titular, separándolo de aquel que se dedica al gasto (que se encuentra en la cuenta corriente). Además, cabe destacar que existe la posibilidad de que surja rentabilidad por el capital depositado, es decir, que genere ingresos pasivos que pueden ayudarnos a crear un colchón económico más potente para el futuro.
La característica más poderosa de estas cuentas es el control que nos ofrecen sobre nuestro dinero, ya que nos permiten vigilar nuestras finanzas de cerca y aumentan nuestra resistencia al gasto. Debido a que si tenemos todo nuestro dinero en una cuenta corriente, se nos hace más fácil gastarlo. Sin embargo, si lo tenemos apartado en una cuenta que está dedicada únicamente y exclusivamente al ahorro, nos lo pensamos dos veces antes de retirarlo.
3. Monitoriza tus gastos y establece presupuestos mensuales
La organización y la planificación financiera personal nunca vienen mal para la vida doméstica. Para poder gestionar deudas innecesarias y asegurarnos un futuro estable sin preocupaciones económicas es imprescindible llevar la cuenta de todo lo que ganamos mensualmente y en qué lo gastamos (comida, transporte, ocio…) para así monitorearlo. Para este paso recomendamos hacer un Excel o una hoja de cálculo que permite editar y distribuir los gastos. Puedes recurrir al formato que más te guste, porque así será más fácil que revises tu plan con frecuencia y lo tengas siempre presente.
Dentro de esta parte del proceso, la creación de un presupuesto mensual es un pilar clave. Crea tu presupuesto asegurándote de que tus gastos no superen tus ingresos y que una parte de tus ingresos esté reservada para el ahorro. Un método muy útil para aplicar es la regla del 50/30/20: destinar 50% a gastos imprescindibles, 30% para gastos opcionales y 20% para ahorro y deudas.
4. Aprende a consumir con conciencia
Frecuentemente asociamos el salir a la calle con gastar. Hacer planes sin consumir nos parece inconcebible. Desvincular el ocio del gasto es un cambio de mentalidad necesario para la mejora. Es posible hacer actividades gratuitas o de bajo coste para divertirse como salir a comer al aire libre sin que sea necesariamente en un restaurante.
De la misma manera, aunque parezca muy sencillo, también es útil buscar alternativas más económicas a los productos que consumimos. Si se te hace muy complicado ahorrar, quizás la solución más viable es que revises tus hábitos de consumo y busques opciones más asequibles. El objetivo es revisar en qué destinas tu dinero para así recortar en gastos innecesarios.
5. Anticipate al futuro con una buena planificación financiera
Sin una motivación tras nuestro propósito de ahorrar es complicado que se lleve a cabo. Por esta razón, es fundamental como titular establecer unas metas financieras específicas a corto, medio y largo plazo. Empezando por ejemplo, por proponerte ahorrar para un viaje, y más adelante, pensar en planificar tu jubilación o crear un fondo de emergencia para gastos imprevistos. Si empiezas por metas pequeñas te será más fácil pasar a propósitos mayores. Esta estrategia te ayudará a sentirte más motivado con tu meta y ser fiel a tu compromiso: ahorrar.
Comentarios
Este artículo aún no tiene comentarios. Sé el primero en comentar.