Los préstamos para reportados son aquellos concedidos incluso a personas con reportes negativos en centrales de crédito. En Credilemon te ayudamos a encontrar los préstamos para reportados más favorables para ti.
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Los préstamos para reportados son préstamos a los que puedes acceder incluso con un reporte negativo en centrales de crédito. Tener estos reportes negativos puede dificultar el proceso de obtener un préstamo, pero no lo hace imposible. Todavía hay varias entidades financieras dispuestas a prestar a personas con este historial crediticio negativo, bajo ciertas circunstancias.
Estar “reportado” generalmente se asocia con tener deudas sin pagar. La realidad es que todas las personas que piden un producto crediticio son reportadas a las centrales de riesgo como Datacrédito o TransUnion. El reporte puede ser positivo si pagaste a tiempo o negativo si te retrasaste en los pagos. Este reporte negativo es el que se conoce popularmente.
El reporte negativo no se da solo por préstamos o tarjetas de crédito, también puede darse por facturas de servicios sin pagar o cheques devueltos por falta de fondos. Cuando te atrasas en estos pagos, la entidad primero debe notificarte de este atraso; si pasan 20 días sin que hayas pagado, entonces pueden reportarte a una central de riesgo. También cabe destacar que los reportes negativos pueden permanecer en el historial hasta 4 años después de haber saldado la deuda, por lo que pueden afectarte incluso después de haber cumplido con tus obligaciones de pago.
Los reportes negativos pueden afectar tu capacidad de obtener préstamos porque los bancos e instituciones financieras piensan que si tienes deudas, es más probable que no puedas pagarles el préstamo. Para evitar una situación en la que pierdan dinero por falta de pago, deciden denegar tu solicitud de préstamo. Sin embargo, no todo está perdido. Hay bancos y entidades crediticias que sí ofrecen préstamos incluso a personas con reporte negativo en centrales de riesgo.
Las entidades financieras que te prestan incluso con un reporte negativo generalmente lo hacen porque pueden mitigar el riesgo de alguna forma. Es por esto que los siguientes son los créditos más comunes para reportados:
Crédito de libranza: Es un tipo de crédito otorgado por bancos que descuenta los pagos mensuales directamente de tu salario. Debido a que el banco obtiene el dinero automáticamente cada mes, el riesgo de impago es muy bajo.
Crédito prendario: Este tipo de crédito utiliza alguna posesión valiosa como garantía. Pueden ser joyas, relojes, aparatos electrónicos u otras posesiones similares. Generalmente, la entidad realiza una evaluación de la prenda para determinar su valor y presta una cantidad acorde al mismo. La prenda funciona como garantía, lo que reduce el riesgo de perder dinero.
Crédito con garantías: Pueden ser garantías vehiculares o hipotecarias. Si tienes un carro o una vivienda a tu nombre, puedes utilizarlos para obtener un préstamo. El funcionamiento es similar al del crédito prendario, pero te permite acceder a cantidades más grandes de dinero.
Crédito online: Son préstamos comunes, sin garantías ni codeudores. Algunas entidades financieras los ofrecen aunque estés reportado, pero suelen ser por montos menores. Para compensar el riesgo, los intereses podrían ser un poco más elevados.
También es posible acceder a préstamos de libre uso tradicionales si tienes a una persona como codeudora o como garante. Si es codeudora, la persona toma el préstamo junto a ti y ambos tienen la responsabilidad de pagarlo. Si es garante, tú tienes el préstamo, pero la persona se compromete a pagar en caso de que tú no puedas hacerlo.
Estos son algunos de los requisitos más comunes en préstamos para reportados:
Tener al menos 18 años. Algunas entidades tienen una edad máxima, como 75 u 80 años.
Ser colombiano o residir permanentemente en el país.
Tener ingresos demostrables de al menos un salario mínimo vigente.
Tener cuenta bancaria, número celular y correo electrónico.
En algunos casos, piden que el reporte negativo no exceda cierta cantidad de días; por ejemplo, 60 días.
Adicionalmente, cabe mencionar que los créditos de libranza exigen que estés empleado en una empresa que tenga convenio con el banco, o que seas pensionado. Si el convenio no existe, al banco le resulta imposible descontar los pagos automáticamente del salario, como se hace en este tipo de crédito. Por otro lado, los créditos prendarios y con garantía exigen que tengas una posesión a tu nombre.
Los requisitos varían dependiendo de la gravedad del reporte negativo, de la cantidad solicitada y del tipo de crédito. Sin embargo, en líneas generales suele ser necesario demostrar que se cuenta con ingresos para que la entidad piense que sí puedes pagarles, aunque tengas un reporte negativo.
Uno de los primeros pasos es determinar el tipo de préstamo que te gustaría pedir. Para ello, por una parte tiene que ver la cantidad de dinero que necesitas y, por la otra, qué garantía puedas tener disponible. Los créditos de libranza, prendarios y con garantía dependen de que tengas un trabajo en una empresa que permita créditos, alguna prenda valiosa o un carro o una vivienda a tu nombre. En caso de que no tengas alguno de estos, entonces el crédito online sería la opción más viable.
Por otro lado, cabe mencionar que la cantidad de dinero que puedas recibir está limitada por el tipo de garantía que tengas. En un crédito de libranza, solo puedes obtener cierto porcentaje de tu salario mensual, y en los créditos prendarios y con garantía, la cantidad a prestar está determinada por el valor de la posesión utilizada. Los créditos prendarios pueden ser por cantidades pequeñas o moderadas de dinero, mientras que el crédito con garantía de carro puede ser por cantidades más grandes, y el hipotecario por cantidades más altas.
Una vez hayas decidido el tipo de préstamo que más se ajusta a tus necesidades y circunstancias, el siguiente paso es comparar varios préstamos del mismo tipo para encontrar el más favorable. Para esto, el punto de comparación más importante es la tasa de interés. Entre más baja la tasa de interés, mejor para ti, ya que la deuda crecerá más lentamente. Utiliza la tasa efectiva anual (EA) para comparar, ya que esta considera tanto el interés como las comisiones y gastos que podrían aplicarse.
Otros puntos de comparación son condiciones como el plazo de pago y las comisiones. El plazo de pago es sobre todo importante en el caso de los créditos prendarios, con garantía y online, y debería ser suficiente para permitirte pagar a tiempo. Las comisiones pueden ser por apertura del préstamo o procesamiento de tu solicitud y se aplican a todos los préstamos; cuanto menos comisiones tenga el préstamo, mejor.