Tarjetas Revolving

Tarjetas Revolving

Los pagos aplazados o revolving son una forma de pago disponible para algunas tarjetas de crédito. Hay tarjetas que funcionan exclusivamente a través de pagos aplazados, pero lo más común es que funcionen con varias formas de pago, incluyendo revolving. Cuando una tarjeta de crédito permite utilizar pagos aplazados, generalmente tú puedes seleccionar a través de la aplicación si quieres pagar una compra con revolving, o si prefieres pagarla de forma tradicional. 

Estas tarjetas permiten el acceso a una línea de crédito que puede ser utilizada para pagar compras en el momento y devolver el dinero al banco posteriormente en plazos mensuales. Mientras estás devolviendo el dinero, puedes continuar utilizando la tarjeta para hacer compras, hasta que alcances tu limite de crédito.

Cómo funcionan los pagos aplazados

Una tarjeta de crédito tradicional funciona de siguiente manera: haces una compra y a fin de mes debes devolver el dinero gastado. Si no lo devuelves, o si lo devuelves parcialmente, comienzan a acumularse intereses.

Una tarjeta revolving, en cambio, funciona así: haces una compra y eliges cuánto quieres pagar mensualmente. Cada mes vas abonando la cuota correspondiente hasta completar el total de la deuda más un porcentaje de interés. Por ejemplo, si haces una compra de 500€ y eliges pagar 100€ al mes, pagarás 5 cuotas, más una cuota adicional de un importe menor por intereses.

Mientras más alta sea la cuota a pagar, menos tiempo tardarás en saldar la deuda y menores serán los intereses. En cambio, si solo pagas la cuota mínima establecida por el banco, tardarás más tiempo y pagarás más intereses. 

Ventajas y desventajas de las tarjetas revolving

La principal ventaja de utilizar esta forma de pago es la flexibilidad, ya que puedes hacer frente a una compra grande sin tener que devolver el importe completo a fin de mes. Por ejemplo, si quieres comprar un ordenador de 1000€, puedes hacerlo sin tener que preocuparte por devolver esos 1000€ a fin de mes. En su lugar, podrías devolver solo 200€ cada mes hasta saldar la deuda.

Además de esto, las tarjetas revolving tienen todas las ventajas de las tarjetas de crédito en general:

• Acceso a una línea de crédito

• Cashback y descuentos en compras

• Protección contra fraudes al comprar en línea

• Seguros de viaje o acceso a salas VIP en aeropuertos

• Método de pago muy aceptado en el extranjero, entre otros

Sin embargo, hay algunos riesgos o desventajas que es muy importante tener en cuenta:

• Es más sencillo sobreendeudarse, ya que la flexibilidad de solo pagar una fracción al mes puede llevarte a gastar más de lo debido.

• Los intereses son más elevados que con la tarjetas de crédito tradicionales, lo cual hace que cada compra sea más cara.

• Las condiciones pueden ser difíciles de entender y el pago mínimo establecido por los bancos puede dar una falsa sensación de seguridad. 

Consejos para utilizar una tarjeta revolving

A pesar de los riesgos, una tarjeta revolving puede ser una herramienta útil si la utilizas responsablemente. Estos son algunos consejos para ayudarte:

• Elige la cuota más alta que puedas. La cuota mínima puede parecer tentadora, pero en la mayoría de los casos solo servirá para extender la deuda por más tiempo, con lo que pagarás más intereses. En lugar de ello, elige el importe más alto que puedas pagar cómodamente.

• Si puedes pagar la deuda de forma anticipada, hazlo. Mientras menos tiempo tardes en saldar la deuda, menos intereses pagarás en total.

• Sé intencional con tus pagos aplazados. Usa tu tarjeta revolving solo para compras de importe más elevado y nunca la uses como método de pago por defecto. De esta forma, evitarás que tu deuda crezca demasiado.

• Lleva control de tus pagos aplazados para que sepas exactamente cuánto gastaste y en qué. También, revisa frecuentemente la aplicación de tu banco para tener presente cuánto dinero debes.

Si utilizas tu tarjeta revolving con cuidado, puede ser una gran herramienta que te permita hacer compras grandes con mayor comodidad, a la vez que evitas caer en deudas innecesarias.

Cómo elegir una tarjeta revolving

Primero, asegúrate de que realmente necesitas una tarjeta revolving y que entiendes cómo funciona. Considera elegir una tarjeta de crédito con opción de pagos aplazados, en lugar de una tarjeta 100% revolving.

En segundo lugar, compara diversas tarjetas revolving para ver sus condiciones. Los intereses a pagar son lo principal a lo que deberías prestarle atención, pero también revisa la frecuencia y flexibilidad con la que puedes cambiar el importe de tu cuota mensual.

Si tienes dos o más tarjetas con condiciones similares, compara también los beneficios como cashback y descuentos, para ver si hay alguna tarjeta que ofrezca unos más atractivos para ti.

Si ya te has decidido por una tarjeta, lee cuidadosamente toda la información precontractual antes de solicitarla y el contrato una vez la hayas solicitado. Si hay algo que no entiendes, pregúntale a servicio al cliente. Es importante que entiendas a fondo cómo funciona la tarjeta antes de utilizarla.