Una tarjeta de crédito te permite hacer una compra incluso si no tienes suficiente dinero en el momento. A cambio, deberás devolver el monto de la compra en una fecha posterior. En Credilemon puedes comparar las mejores tarjetas de crédito de México y elegir la que sea perfecta para ti.
Las tarjetas de crédito son un producto financiero que te permite financiar tus compras. Cuando solicitas una tarjeta, el banco te asigna un límite de crédito —por ejemplo, $10.000—. Después, tú puedes utilizar esa tarjeta para hacer compras tantas veces como quieras, siempre que no superes el límite. Toma en cuenta que deberás devolver al banco el monto que hayas gastado.
Estas tarjetas suelen ser emitidas por los bancos en colaboración con empresas de crédito. Las empresas más conocidas son VISA, MasterCard y American Express, aunque también hay otras menos conocidas como JCB o Discover. También hay cadenas de tiendas que pueden colaborar con las empresas de crédito o con un banco para emitir tarjetas de crédito propias que pueden ser utilizadas en sus tiendas y en comercios aliados.
Hay 5 conceptos que es fundamental entender antes de solicitar una tarjeta:
Límite de crédito: Es el máximo de dinero que puedes gastar con tu tarjeta de crédito. Este límite lo asigna el banco dependiendo de tus ingresos, tu historial crediticio y los gastos que tengas mensualmente. Puedes consumir solo una pequeña parte de ese límite, no estás obligado a utilizarlo todo.
Fecha de corte: El uso de la tarjeta se divide en periodos de 30 días. Todos los pagos que hagas en ese periodo se cobrarán en una misma fecha de pago. La fecha de corte es el último de esos 30 días. Si haces un pago después de la fecha de corte, se cobrará en la fecha de pago del periodo siguiente.
Fecha de pago: Es el último día que tienes para pagar lo consumido en el periodo anterior. La fecha de pago suele estar fijada 20 días después de la fecha de corte. Si no pagas tu deuda en su totalidad en la fecha de pago o antes, comenzarás a acumular intereses.
Intereses: Es un porcentaje del dinero gastado que debes dar al banco como pago por el dinero que te prestó con la tarjeta. Si pagas completo en la fecha de pago, no se acumulan intereses.
Costo Anual Total (CAT): Es un indicador que refleja qué tan cara es una tarjeta de crédito. Incluye todos los intereses, comisiones, anualidades, seguros y cualquier otro cargo que el cliente tendría que pagar en el curso de un año.
Para entender mejor la fecha de corte y fecha de pago, supongamos que tu fecha de corte es el 30 de junio. Todas las compras que hagas entre el 1 y el 30 de junio entran en el mismo periodo y deberás pagarlas como máximo el 20 de julio. Por ejemplo, una compra que realices el 29 de junio deberás pagarla el 20 de julio, pero una compra que realices el 2 de julio deberás pagarla el 20 de agosto.
Al momento de utilizar tus tarjetas, entender estos conceptos te ayudará a asegurarte de que podrás pagar tus compras en la fecha de pago correspondiente y que la fecha de pago no te tome por sorpresa.
Utilizar tarjetas de crédito tiene varias ventajas importantes:
Te permite comprar aunque en el momento no tengas el dinero completo
Si las usas responsablemente, puedes construir un historial de crédito positivo
Incorporan medidas para protegerte contra fraudes
Son útiles para viajar ya que las aceptan en muchos establecimientos en todo el mundo.
Te dan acceso a beneficios como cashback, descuentos, puntos que puedes canjear por recompensas, etc.
Pero también tienen algunas desventajas:
Los intereses sonn elevados y se pueden acumular fácilmente
Si las usas de forma irresponsable, puedes caer en sobreendeudamiento
Su funcionamiento puede confundir y generar problemas
Pueden generar tentación a gastar excesivamente al confundir la línea de crédito con dinero disponible.
Algunas tarjetas pueden cobrar comisiones si no la utilizas cada mes
Para evitar que las desventajas te afecten, lo mejor que puedes hacer es informarte bien sobre cómo funciona la tarjeta que quieres pedir y entender todos los gastos y comisiones que podrían cobrarte, de forma que no te tomen por sorpresa. Además, trata de evitar que se convierta en tu método de pago principal, ya que si las usas para todo, eventualmente podrías tener problemas para devolver todo lo gastado.
La tarjeta de crédito y el préstamo tienen el mismo objetivo: darte financiación para que puedas comprar algo que en el momento no tienes el dinero para pagar. Sin embargo, la forma en que funcionan es completamente diferente.
La tarjeta de crédito es un producto de uso continuo. Puedes utilizarlo todos los meses y tu límite de crédito se recupera conforma vas devolviendo el dinero. El préstamo es un producto de un solo uso. Te conceden el dinero un vez y tienes que devolverlo en los plazos establecidos.
Con una tarjeta de crédito tú nunca ves el dinero. Simplemente pasas la tarjeta y el banco le paga al comercio por ti. Con un préstamo, el banco o la entidad financiera te transfiere el monto solicitado a tu cuenta y puedes utilizar ese dinero como veas conveniente.
Con una tarjeta de crédito solo devuelves el dinero que gastaste. Si compraste algo por $500, solo tienes que devolver esos $500, aunque tu límite de crédito sea de $10.000. Con un préstamo, tienes que devolver la totalidad del préstamo más intereses. Si pediste $5.000, deberás devolver esos $5.000 más intereses, aunque al final solo hayas utilizado $1.000.
Con la tarjeta de crédito no acumulas intereses si pagas la totalidad de la deuda en la fecha de pago o antes. Con un préstamo, a veces la entidad financiera tiene una promoción de primer préstamo con 0% de interés, pero aparte de eso, siempre deberás pagar intereses. Incluso si quieres cancelar la deuda con antelación a la fecha de pago, deberás pagar una compensación por los intereses que no se acumularán al pagar antes.